Un ERP en la industria alimentaria es la herramienta de software clave para cualquier empresa del sector. A estas alturas, todo el mundo es consciente de la importancia que tiene la digitalización de un negocio y cómo la transformación digital puede ahorrarnos tiempo, dinero y quebraderos de cabeza.
No obstante, las peculiaridades sectoriales han de ser tenidas en cuenta para cada caso. Por eso, un ERP en la industria alimentaria tiene que estar adaptado a la propia industria, lo que se conoce como un «ERP vertical».
Contar con un ERP personalizado y a medida para tu sector es una tarea compleja que exige un alto nivel de precisión. El cuidado en sus procesos y elaboración de estrategias competitivas es una característica diferencial que obliga a utilizar una herramienta de gestión más específica. Los beneficios que se consiguen, por otro lado, superan con creces los inconvenientes que se puedan derivar del proceso. ¡Vamos a conocerlos!
¿Para qué sirve un ERP en la industria alimentaria?
Contar con un ERP en la industria alimentaria permite a la compañía aumentar su eficiencia, a la vez que reduce los costes. La característica principal de los programas de gestión empresarial (ERP) son el incentivo que generan en cuanto a rendimiento/rentabilidad por y para la compañía.
Al contar con un ERP vertical y específico adaptado a los requerimientos de la industria alimentaria, se obtiene acceso a unos beneficios difíciles de alcanzar por otros métodos:
Gestión de inventarios y producción
El sistema ERP ofrece un control exhaustivo de la producción y fabricación de alimentos y bebidas. El programa optimiza los recursos a través de una base de datos centralizada, capaz de eliminar redundancias, detectar operaciones innecesarias y llevar un control del inventario y fechas de expiración. Esta funcionalidad del ERP en la industria alimentaria es fundamental para aportar un mayor rendimiento de la materia prima y optimizar los recursos de manera que no perdamos tiempo ni dinero en errores de sobreproducción o mermas.
Disminución de los esfuerzos
Un ERP en la industria alimentaria planifica la información sobre la producción, la gestiona y crea expedientes a partir de las órdenes de productos. Además, el sistema es capaz de administrar las metodologías de distribución de los productos según su fecha de vencimiento, clasificar los productos por categorías o lotes, identificar defectuosidades, generar una reposición automática del stock… En definitiva, automatizar un montón de tareas rutinarias en las que se invierte una gran cantidad de tiempo al hacerlas de manera manual.
Mayor trazabilidad y fiabilidad
La trazabilidad es fundamental en la industria alimentaria ya que se debe llevar un exhaustivo control y seguimiento sobre el origen, manipulación y distribución. Ya sea tanto en los productos elaborados como en los alimentos frescos, las exigencias de las normativas y regulaciones de calidad son de obligado cumplimiento. El ERP nos ayuda a generar de forma automática documentación de seguridad relacionada con el control de los procesos llevados a cabo, pudiendo detectar alteraciones o modificaciones en caso de necesitar retirar lotes de productos en mal estado. Tener centralizada toda la información de manera organizada y precisa es una garantía para el control de calidad.
Aumento de la calidad y la satisfacción del cliente
El sistema ERP en la industria alimentaria nos ayuda con el etiquetado y el servicio ofrecido al cliente. Se asegura de que los productos cumplan con las distintas especificaciones en la calidad exigidas por los reguladores de la industria y las demandas de los consumidores en cuanto a transparencia sobre los ingredientes. El ERP incluye herramientas para controlar las cadenas de abastecimiento y la calidad, además de permitir la tramitación de posibles quejas y reclamos que puedan proceder por parte de los clientes, facilitando así la rápida detección de un producto defectuoso o dañado.
TPV + eCommerce
Para cualquier empresa dedicada a la comercialización de alimentos o bebidas, es un requisito básico que su ERP incluya un sistema TPV para llevar a cabo su venta al público de manera eficiente, con registro de tickets, emisión de facturas, etc… Si a esto le sumas también la integración de cualquier sistema eCommerce desde el que poder gestionar pedidos, stock y ventas, ¡tienes un combo potentísimo centralizado en una misma herramienta!
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